La Torre del Conde es una
fortaleza castellana del siglo XV situada en San Sebastián de La Gomera, de
estilo gótico tardío, es la única de las fortalezas construidas durante la
conquista de Canarias que aún queda en pie.
Fue mandada a construir Don Hernán
Peraza el Viejo, Conde de la Gomera, entre 1447 y 1450, como representación del
poder señorial y lugar de refugio de los señores castellanos durante la Rebelión
de los Gomeros.
Fue declarada Monumento Histórico
Artístico el 13 de diciembre de 1990, y es el símbolo más conocido de la isla
gomera.